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05. 15/02/69 El amor y la reverencia | La gran noche de Shiva La gran noche de Shiva
15 de Febrero de 1969
Prasanthi Nilayam
Mahaashivaraathri
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La gloria y la majestad del Señor son inmanentes en el universo, como fragancia en el aire, calor en el fuego o como mantequilla en la leche. Es el hilo que atraviesa y mantiene unidas todas las cuentas. Conocerlo como tal, comprender que Él es la fuente, el soporte y la esencia de toda esta creación es el fin y la meta de la vida humana. Ésta es la esencia y el significado de las enseñanzas de todas las escrituras que el hombre ha heredado del pasado, en todos los idiomas y en todas las regiones. Todas las religiones son meros intentos de demarcar el camino hacia esta consumación. Todos los códigos morales regulan el habla, la acción y los sentimientos humanos para que el hombre pueda ver el camino con mayor claridad y hacer que sus pasos sean más firmes sobre él. La India es la tierra donde este precioso conocimiento fue alcanzado y difundido por ardientes investigadores y eruditos.
Pero hoy tenemos que lamentar el deterioro de estos ideales y la decadencia de los indios, que han caído al nivel de ridiculizar las altas bienaventuranzas espirituales que estos sabios han logrado. Ha llegado el momento de respetar la cultura que les dio esa visión y esa victoria para conducirlos en una peregrinación hacia la verdad, para descubrir en la jungla de la multiplicidad, la unidad básica, que es la realidad. Como equipo para este arduo viaje, los sabios delinearon varias reglas, disciplinas, prácticas y caminos; adhiriéndose a ellos, el hombre es capaz de recordar constantemente que está destinado a comprender esta divinidad esencial. El ayuno y la vigilia prescritos el día de Shivaratri son ejemplos de tales disciplinas; porque el ayuno y la vigilia están destinados a alejar la mente de los sentidos y acercarla al Señor.
Cinco sacrificios que se harán por todas partes.
Los sabios delinearon para el mismo esfuerzo intenso, cinco sacrificios (yajñas) por cada ser humano, dondequiera que esté, a cualquier clase a la que pertenezca. Estos sacrificios no son ejercicios rituales elaborados, acompañados de recitación védica, prescritos para la realización de un estado específico de dicha después de la muerte o victorias específicas de naturaleza terrenal. Son más simples y democráticos. Los están llevando a cabo los hombres, en todas partes, de manera casual y sin conciencia del significado. Estos sacrificios no requieren credenciales complicadas para quienes estén dispuestos a realizarlos. Cualquiera puede empezar con ellos y tener éxito. Estos son pasos indispensables en el progreso espiritual.
Los cinco sacrificios son: (1) Sacrificio por Dios; (2) Sacrificio para honrar a los sabios; (3) Sacrificio para honrar a los padres; (4) Sacrificio para venerar a los visitantes; (5) Sacrificio para reverenciar a los animales de compañía. Se llaman Daivayajna, Rishiyajna, Pithruyajna, Athithiyajna y Bhuthayajna en sánscrito.
1. Daivayajna: Es práctica recomendada dividir una pequeña habitación para el santuario durante la construcción de las casas. En cada hogar hindú, tenemos un templo, altar o santuario doméstico, donde los miembros de la familia, solos o todos juntos, pueden adorar a Dios. Por lo general, se coloca una fotografía o imagen allí para recordarle el vasto infinito que Él representa. En este santuario se ofrece culto diario, se ofrecen oraciones ante él, se medita en esta tranquilidad, se guarda el nombre de Dios en la lengua y se disfruta de su dulzura. Esto es daivayajna; purifica la casa y trae a Dios a la conciencia del hombre a través de todas sus actividades.
Actividades para reverenciar a los sabios.
2. Rishiyajna es el término que se usa para las actividades del hombre que venera al sabio. Son principalmente: el estudio y la práctica de las Sagradas Escrituras, que son el tesoro de la sabiduría lograda por el ardiente ascetismo de los sabios. Los Vedas son los textos más antiguos, los más concisos, filosóficamente los más profundos, los más prácticos de todas las escrituras y los más universales. Luego tenemos el Ramayana, Mahabharata, Bhagavatha y otras narrativas de la eterna batalla entre el bien y el mal y la gracia eterna de Dios que ayuda al triunfo del bien. Estos y otros libros purifican y reconfortan, elevan y exaltan, corrigen y convencen y llenan la mente de valor y humildad. Es incluso una tragedia que estas fuentes vitalizadoras de fuerza se descuiden y la gente en cambio lea libros violentos y obscenos, degradantes y vulgares, que describen el comportamiento demente de los locos desafortunados, sin darse cuenta del daño que están haciendo a su propia salud mental y progreso.
Estos libros, poco a poco, atascan al hombre en el barro del sexo y el pecado; devuelven al hombre a estados bestiales. Afirmar ser "hombres" es sólo la mitad de la tarea de la vida; debe ser probado por tus acciones, palabras y pensamientos, que no eres solo un animal. Este es un anverso de la primera declaración; no se puede ignorar. Se humano; manten alejado al animal; Controla tus sentidos, pasiones y emociones con las riendas de la discriminación y el desapego. Esto es lo que enseñan los buenos libros. Acude a ellos para recibir consejos e inspiración.
Los padres deben ser atendidos y obedecidos.
3. El tercer sacrificio es en nombre de tus padres, Pithruyajna. El mandato de los Vedas es "Mathru dhevo bhava; Pithru dhevo bhava" --- "Que la madre sea tu Dios; que el padre sea tu Dios". La estrofa se repite hasta el cansancio hoy, pero no hay señales de reverencia hacia los padres en ninguna parte. La generación que no respeta ni valora a sus padres está destinada a terminar en desastre. Los padres sufren grandes sufrimientos y se niegan a sí mismos diversas comodidades para poner a sus hijos en la escuela hasta la universidad; pero los niños son ingratos; ridiculizan a sus padres y los fastidian con súplicas insistentes, causan angustia y angustia mental a sus padres, ridiculizan sus hábitos y actitudes y descuidan sus consejos con negligencia. Cuando los creadores de su equipo físico y composiciones mentales son tratados así, con sacrilegio, ¿cómo se puede esperar que adoren al Creador del Universo, Dios que provee para todos? Honra a tus padres para que tus hijos aprendan a honrarte.
Hay una excelente historia, mencionada en los Puranas sobre esto. Los padres divinos, Shiva y Parvati, formularon una vez una prueba para sus dos hijos, Ganapathi y Subramanya. Debían dar la vuelta al mundo y regresar a ellos; el que lo hiciera más rápido ganaría el premio. Subramanya se puso en marcha, rápido y apresurado, y marchó a través de montañas y llanuras; pero Ganapathi rápidamente rodeó a sus padres y reclamó el premio. Dijo: "Los padres son el mundo", y la declaración fue aceptada como correcta. Ganapathi se definió como la deidad que supervisa la adquisición de conocimiento y que salva a todos los aspirantes de los obstáculos en su camino.
La moraleja de esta historia es que se debe cuidar y obedecer a los padres. Este es el verdadero Pithruyajna. Representan la renuncia, la tradición, la cultura acumulada del pasado, los valores permanentes, en contraste con las vanidades fugaces. Esta es la razón por la que Shiva se llama Samba-Shiva, Sa-Amba-Shiva, Amba significa Madre, Shiva significa Padre y Sa indica Sathya (verdad), Sarvavyap (omnipresencia), Sarvajna (omnisciencia) y Sakshathkara (autorrealización).
Trata al extraño que pide comida como a un enviado de Dios.
4. Athithiyajna significa actos hechos para complacer y consolar a Athithi (el que viene solo por un día), lo que significa el extranjero, que llega a tus puertas pidiendo comida o refugio. Dale lo que pide, como acto de adoración. Trátalo como si hubiera sido enviado por Dios o como Dios mismo. Ésta es una tarea sagrada prescrita por los Vedas. Comparte tus comidas con cualquier persona que te pida comida cuando estés a punto de comerla. Satisfaz el hambre del otro antes de satisfacer tu propio hambre.
5. El último de los sacrificios es Bhuthayajna - pasos para consolar y mantener felices a los animales y compañías colaboradoras que te rodean: bueyes, vacas, cabras, caballos, que te ayudan con tu trabajo, y perros, gatos y otras mascotas que hacen que tu hogar sea agradables y lleno de alegría. No debes mantenerlos con hambre ni hacer que trabajen demasiado. Si algún animal que depende de tu amor y cuidado derrama una lágrima en tu casa o granja, recuerda, sufrirás mucho por ello.
Amor y reverencia: estas son las verdaderas fuentes del sacrificio o yajña. Deja que todas tus acciones, palabras y pensamientos se llenen de amor y reverencia. Entonces tendrás una paz y una alegría inquebrantables.
Traduccion AUTOMATICA DEL PORTUGUES
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