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Discursos dados por Sai Baba

02. 21/05/91 El Patrimonio Védico de la India

21 de Mayo de 1991

Brindavan

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El Creador brilla dentro del universo,

Y el universo se refleja en el Creador.

Dios y la Creación están eternamente unidos como amigos.

Las palabras de Sai transmiten la Verdad.

Todo el cosmos reside en Dios (Isavaasyam idam jagat). El mundo es donde nacemos, crecemos y morimos. La Tierra es la base del mundo. El viento impregna todos los lugares en todo momento, sin un instante de descanso, pero no es visible para la gente. El trabajo, los viajes y el cuidado del cuerpo se realizan durante el día. La naturaleza duerme silenciosa por la noche. Uno ve luz durante el día y oscuridad por la noche. Es esencial reconocer la relación entre la luz y la oscuridad.

Miren hacia arriba, y percibirán el glorioso Sol contra el fondo del cielo azul. En el cielo infinito, hay un solo Sol que derrama una luz brillante. Las actividades se realizan en este mundo cada momento. Buenas acciones, deberes, nacimientos, muertes, matrimonios, celebraciones… Tales acciones son ejecutadas sin cesar por la gente. mientras vacilan entre la alegría y la tristeza. No hay fin para esta rutina.

El hambre asalta a una persona justo después del nacimiento. Tan pronto como se corta el cordón umbilical, el bebé llora pidiendo alimento. Deja de llorar cuando se le da miel, glucosa o leche. Por lo tanto, el primer problema que se encuentra es el hambre. El alimento es el medio para satisfacer el hambre. El alimento crece con la ayuda del agua. Pueden haberse inventado máquinas y computadoras, pero solo el alimento y el agua satisfacen el hambre. La Tierra acepta la ofrenda del agua y suministra grano a la humanidad.

A medida que las personas cultivaron la Tierra, la población aumentó. Se desarrollaron la agricultura, la ganadería, los pueblos y las ciudades. La sociedad humana progresó al entender la naturaleza y utilizarla para sus necesidades básicas. Los seres humanos comenzaron a recolectar artículos para sus necesidades diarias. Descubrieron algunos secretos de la naturaleza. Fueron más allá y comprendieron que lo que sabían era limitado en comparación con lo que necesitaban descubrir.

La humanidad no puede crear tierra ni crear agua. Cuando dos ramas de un árbol se frotan entre sí, se producen chispas. Las personas no introdujeron el fuego en la madera. El fuego, aunque inherente a la rama, protege la rama sin quemarla. Esto es algo que supera a la humanidad. De esta manera, gradualmente reconocieron que había un poder que era invisible, inaudible y más allá de la capacidad de la mente.

Para saber algo, es necesaria la experiencia directa. Las personas comenzaron a indagar sobre métodos para obtener pruebas directas de este poder sobrehumano. Desarrollaron la fe de que el Sol era una prueba de la existencia de la Divinidad. Sin el Sol, no habría luz. Para el crecimiento de los cultivos o los seres vivos, el hidrógeno es muy esencial. La energía del Sol proviene del hidrógeno y el helio. El mundo no puede existir sin estos dos elementos. Por lo tanto, la gente estaba convencida de que el Sol era una percepción directa de Dios. También descubrieron algunos secretos sutiles relacionados con el Sol.

Así, el Dios Sol comenzó a considerarse la divinidad patrona del Mantra Gayatri. «Dhi yo yo nah prachodayaat»: nuestro intelecto debe brillar tan radiante como el Sol. Se ofrecían estas oraciones. Invocando al Dios Sol a través del mantra Gayatri, las personas reverenciaban a Gayatri como la Madre de los Vedas.

El mantra Gayatri no está restringido a un cierto período de tiempo, a un país en particular o a una cierta clase de personas. «Bhur bhuvah suvaha» se refiere a los tres tiempos: pasado, presente y futuro. Solo la luz disipa la oscuridad. «Bhargo Devasya dheemahi»: para disipar la oscuridad de la ignorancia, se invocaba al Dios Sol.

Gradualmente, las personas comenzaron a aprender los números. Uno, dos, tres, cuatro, cinco, seis, siete, ocho, nueve, diez. De estos diez números, el número 1 es el principal. Todos los demás son meramente sus combinaciones. Dos es 1 repetido dos veces. Nueve es la repetición de 1 nueve veces. Uno se dio cuenta de que todos los números eran formas alternativas del número 1.

Por lo tanto, «La Verdad es una, pero los videntes la describen de muchas maneras» (Ekam sat vipraa bahudaa vadanti). La humanidad comprendió que la base subyacente de la creación es una sola, aunque la gente la veía como múltiples formas. Los Vedas expresan este concepto como: «El Uno aparece como muchos» (Ekoham bahusyaam). Sin el número UNO, ningún otro número puede existir. Incluso a través de la matemática, la humanidad llegó a la verdad de que Dios es Uno.

Así, las personas creyeron firmemente que había una Fuerza todopoderosa en el universo, y que era solo una, sin segunda. Se descubrió que ese poder único había asumido múltiples nombres y formas y permeaba el universo. Los Vedas anunciaron esta verdad con las palabras: «Isaavaasyam Idam Jagat».

La gente de la antigua India llamaba a este poder por el nombre Aaditya. Aaditya significa uno de los doce Aadityas, a saber, Vishnu. Ahora bien, Vishnu no es solo un ser de cuatro brazos sosteniendo la concha, el disco, la maza y el loto. Vishnu es el principio, que es omnipresente. Por supuesto, gradualmente hemos atribuido una forma a ese poder omnipresente. Vishnu significa omnipresencia.

¿Por qué consideramos a Aaditya como el Uno subyacente al cosmos? Consideren recipientes hechos de plata, oro, latón, cobre y barro. Cuando se llenan de agua, ustedes pueden ver el Sol reflejado en todos ellos. Los recipientes pueden ser diferentes, pero el Sol aparece igualmente en todos. Mil recipientes producen mil imágenes del Sol. La gente captó la verdad de que, aunque los recipientes pueden ser muchos, el Sol es uno. Sobre esta base, comenzaron a considerar al cuerpo como un recipiente. El cuerpo es temporal, hecho de barro (mrinmayam), pero alberga una consciencia brillante, dorada e indestructible (chinmayam), que se llamó Hiranyagarbha.

Así, la gente comenzó humildemente, hizo un progreso constante en su comprensión del cosmos y finalmente llegó a la Verdad Última sobre el Uno que aparece como muchos. Le dieron otro nombre a ese Poder Único: Iswara. Esta palabra significa el Uno que tiene una riqueza inagotable. ¿Qué es esta riqueza? Salud, dinero, educación, buenas cualidades, inteligencia, mente, los sentidos: todo es una forma de riqueza. Iswara es la encarnación de todas las formas de riqueza (sakala aisvarya svaroopa).

Luego, la gente se dirigió a Dios con el nombre de Siva. Siva significa aquel que está más allá de los tres gunas (cualidades de la naturaleza): la pureza (satwa), la inquietud (rajas) y la inercia (tamas). Como trasciende los gunas, también se le llamó Suddha Satwa (uno con naturaleza pura). Este es el poder que otorga auspiciosidad. La alegría y el bienestar resultan solo en ausencia de los tres gunas. Los gunas conducen a la inauspiciosidad. Por lo tanto, Siva era el más auspicioso.

La humanidad progresó aún más, dando un cuarto nombre a Dios: Sambhava. ¿Qué significa Sambhava? Uno que se expresa y se manifiesta según Su Voluntad, sin estar restringido por reglas, donde sea y cuando sea necesario, es Sambhava. El Bhagavad Gita dice:

«Siempre que la rectitud decae, oh Arjuna,

y la injusticia se eleva, Yo encarno.

Para proteger a los piadosos y destruir a los malvados,

para establecer el dharma, encarno en cada era».

Yadaa Yadaa Hi Dharmasya Glanirbhavati Bharata

Abhyutthaanam Adharmasya Tad Atmaanam Srujaamyaham

Paritraanaaya Saadhunaam Vinaashaaya Cha Dushkrutaam

Dharma Samsthaapanaarthaaya Sambhavaami Yuge Yuge.

La palabra «sambhavaami» significa: Él encarna cuando es necesario, donde es necesario, no limitado por ninguna regla. Así, el hombre reconoció las diversas cualidades de Dios y atribuyó nombres que describen cada aspecto.

Otro nombre atribuido a Dios fue Isa. Debemos entender cuán sublime era el intelecto de las personas en ese tiempo; me refiero a los sabios de la antigua India. Isa significa propiedad, riqueza, fama, belleza, conocimiento y renuncia. El Uno adornado con las seis clases de prosperidad es Isa.

El intelecto se volvió más y más agudo, y finalmente, Dios fue llamado Aprameya. Esto significa: Uno que no puede ser medido por ninguna prueba (pramaana). Posiblemente podemos medir el mar con una cinta o incluso determinar las dimensiones del cielo. Pero es imposible sondear a Dios. Las tres clases de prueba —pratyaksha, anumaana y sabda— no pueden alcanzar a Dios. El hombre comenzó a propalar que este Dios inconmensurable era omnipresente. El mundo no puede existir sin la Divinidad. Crean en ella o no, la Divinidad es omnipresente.

Para encontrarse cara a cara con este poder divino, los sabios de la antigua India emprendieron austeridades (tapas). Entendieron que el objetivo principal de una vida humana es reconocer a Dios, y esto se convirtió en la base de la vida. Mientras que todos comenzaban su búsqueda espiritual con entusiasmo, algunos abandonaron después de decidir que era una tarea imposible. Otros ni siquiera se molestaron en intentarlo, porque decían: «¡Estamos tan caídos y Dios es tan exaltado! ¿Cómo podríamos experimentar el elevado estado de la Divinidad?» No, no. ¡Este sagrado nacimiento humano no ha surgido de ningún lugar excepto de la Divinidad!

«Una eterna chispa de Mí Mismo se convirtió en las almas individuales, en el mundo de los mortales»:

Mamaivaamso jiva loke jiva bhootah sanaatanah.

Un ser humano es una chispa de la Divinidad, nada menos. ¡Es absolutamente necesario que un hijo reconozca a su padre! Reflexionando de esta manera, algunos sabios perseveraron frente a innumerables problemas e inconvenientes. Finalmente, la energía generada por sus austeridades les otorgó el conocimiento de la Divinidad. Los sabios iluminados no ocultaron este conocimiento, sino que lo propalaron por todo el mundo.

«¡Levántense, despierten y alcancen su meta, oh, personas en el sueño de la ignorancia!» (Utishtata, jaagrata, praapya varaannibodhita), declararon los sabios. «Presencien por ustedes mismos la divina refulgencia. Nosotros la hemos visto. ¿Dónde? Dios está presente dentro, fuera, en todas partes (Antar bahischa Thath sarvam vyaapya Narayana sthitaha). ¿Saben qué aspecto tiene Dios? Es imposible describir a esa Gran Persona, brillante como el Sol (Vedaah vedam Purusham Mahaantam, aditva varnam tamasah parastaat). ¿Dónde está presente? Más allá de la oscuridad (thamas)». A menos que trascendamos la oscuridad de la ignorancia, no podemos experimentarlo.

¿Cómo podríamos alcanzar la Verdad sin renunciar a la ignorancia (thamas)?

La devoción no puede amanecer sin antes librarse de la pasión (rajas).

Solo la pureza (sathwa) es un instrumento divino.

No olviden este sensato consejo.

En primer lugar, debemos deshacernos de la cualidad de la inercia ignorante (tamas). ¿Adquirimos el cuerpo solo para comer y dormir? No, no. Comer y dormir son características bestiales. La cualidad humana que trasciende la naturaleza animal es el discernimiento. La eliminación de tamas hace posible el discernimiento y permite que emerja la pasión (rajas). Rajas nos ata, al atraer la mente a una cadena continua de deseos. Cuando rajas también es superado, reina la pureza (sathwa) y trae iluminación.

Estudiantes:

Los secretos revelados en los Vedas son insondables y trascendentales. Aquellos que se acercan a los Vedas con fe y dedicación (sraddha) encuentran el camino muy simple. La persona que abre sus ojos puede ver miles de millones de estrellas en el cielo. Pero uno que es ciego o se niega a mirar no puede ver ni siquiera un potente foco colocado ante sí. ¡No podemos discernir la Divinidad, aunque brilla con el resplandor de un millón de soles! Debemos abrir los ojos de la fe (sraddha) y la devoción: estos son los ojos de la sabiduría, que ven más allá de los ojos físicos.

¿Dónde está Dios? Los estudiantes oran antes de las comidas, pero no captan el significado. Ustedes dicen:

La ofrenda es Brahman, el ghee es Brahman,

ofrecido por Brahman al fuego sagrado, que es también Brahman.

Alcanzará a Brahman

aquel que perciba solo a Brahman en todas las acciones.

Brahmaarpanam Brahma Havir

Brahmaagnaa Brahmanahuatam

Brahmaiva Tena Gantavyam

Brahma Karma Samaadhinaa

El alimento es una ofrenda (arpanam). ¿A quién? En la oración, la ofrecen a Brahma. ¿Dónde está Brahma? La respuesta está presente en la siguiente parte de la oración:

Estoy presente como la Persona Cósmica (Vaisvaanara)

en los cuerpos de todos los seres.

Junto con Prana y Apana,

digiero los cuatro tipos de alimentos.

Aham Vaisvaanaro Bhootva,

Praaninaam Deham Aasritah

Praanaapaana Samaayuktah,

Pachaamyannam Chaturvidham

Dios dice: «¡Oh, hombre loco! Estoy en USTEDES, en la forma de Vaisvaanara. ¡Sin Mi presencia en su cuerpo, morirían de indigestión! Soy el que digiere el alimento que comen». Por lo tanto, no tienen excusa para las dudas.

El que duda nunca puede ser convencido por nadie. Pueden captar la atención de una persona llamándola por su nombre. Una persona dormida puede ser despertada con dos o tres empujones. ¡Pero es imposible despertar a alguien que finge estar dormido! Esto es lo que las doncellas pastoras (gopikas) le dijeron a Krishna: «¡Señor! No estás despierto ni estás dormido. Solo finges estarlo. ¿Cómo podemos despertarte? Por favor, deja de actuar y escúchanos».

Dios no necesita dormir. Si Dios duermiera, ¡todo el universo se dormiría! ¡Dios nunca está despierto, tampoco! ¿Cómo puede caracterizarse a Dios como «despierto» si nunca duerme? ¿Pueden despertar a una persona que nunca está dormida? Despertar y dormir se aplican a aquellos que distinguen entre noche y día. Verdaderamente, no hay nada que deba llamarse día o noche. Dependiendo del curso del Sol y el lugar, el tiempo se categoriza como tal. Cuando el Sol asoma por el horizonte, lo llamamos día. Cuando el Sol se pone, noche. Pero para el mundo, no hay día ni noche.

Este, oeste, norte y sur también son ilusiones. Ascribimos nombres a las direcciones, basados en el Sol naciente y poniente. Por eso los científicos dicen que el amanecer, el atardecer y las direcciones son falacias. Sí, lo dicen, pero no lo demuestran en acción. Dicen: «Buenos días, señor». ¿De dónde vinieron estos «días»? [risas] Si creen que el día y la noche no existen, ¿por qué usan el término, en primer lugar?

De todos modos, mientras estemos subordinados a la naturaleza, viviendo una vida mundana, debemos obedecer sus leyes y vivir según sus estándares. ¿Hasta cuándo? Mientras percibamos las distinciones de «yo», «ustedes» y «ella». Cuando olvidamos estas tres entidades, alcanzamos el Atma. La distinción entre ustedes mismos y otros debe ser rechazada. Esto no es fácil, pero todo es posible con práctica. Lamentablemente, el hombre no persevera con fe y paciencia.

Las personas inicialmente fueron animales, capaces de hacer poco más que comer y dormir. Gradualmente, desarrollaron inteligencia y discernimiento, observaron el mundo a su alrededor e inventaron comodidades. Aunque investigaron todo lo exterior, se detuvieron antes de explicar las razones detrás del nacimiento y la muerte.

¿Cuál es el secreto detrás del nacimiento y la muerte? Uno que nace debe necesariamente morir. Pero no sabemos si la persona fallecida renace de nuevo. Los grandes sabios de la India se esforzaron por descubrir tales leyes. Concluyeron que el nacimiento y la muerte trascienden la comprensión humana, que ocurren debido a la Voluntad de Dios. ¿Por qué?

¿Pueden las personas vivir tanto como quieran? Una persona puede decirse a sí misma: «Estoy sano. Fácilmente puedo vivir 10 años más». Esa misma tarde, podría morir en un accidente automovilístico. ¿Garantizó la buena salud una vida larga? ¿Qué fue responsable de la muerte? No la salud, la fuerza, el dinero ni la propiedad, sino solo la Voluntad de Dios.

Innumerables actividades ocurren sin esfuerzo propio. ¿Hace una persona que su corazón palpite? ¿Inhala y exhala voluntariamente, o provoca la circulación de la sangre? Esto es la voluntad divina, no el esfuerzo humano.

Los sabios concluyeron que nada podía superar la Voluntad de Dios. «Oh, hombre, pueden decirte que vivirás cien años. No creas tales palabras. No puedes decir si morirás como niño, joven o en la vejez, en una aldea, en la selva o en el agua. Mientras la vida permanezca en su cuerpo, conozcan a Dios, conózcanse a ustedes mismos», exhortaron los sabios. No pospongan asuntos tan importantes. Nadie está exento de la muerte. La muerte también es la Voluntad y la Gracia de Dios. Por lo tanto, los sabios aconsejaron al hombre mantener a Dios en la mente, sin cesar.

¿Dónde reside esta fuerza vital en el cuerpo humano? Los Vedas declaran: «Neela thoyadha madhyasthaa vidyalleke ubhaasurah». Tenemos una columna vertebral compuesta por 33 anillos. Entre el noveno y el duodécimo anillo, hay un «destello de relámpago» (vidyulleke), conocido como sushumna nadi. Es resplandeciente y rápido como un relámpago. Energiza los órganos del cuerpo. Algunas personas sostienen que la fuerza vital reside en el corazón. El corazón es meramente el «interruptor principal». Cuando se trasplanta un corazón, ¿abandona la fuerza vital el cuerpo? Solo la sushumna nadi hace funcionar el corazón.

Los sabios antiguos son vistos como mendigos ignorantes, que no sabían nada sobre ciencia o el funcionamiento de la naturaleza. De hecho, aquellos sabios descubrieron mucho más que los científicos de hoy. El mayor científico fue nada menos que Hiranyakasipu. ¡No solo investigó la naturaleza, sino que sometió los cinco elementos a su dominio! Los científicos actuales no pueden reclamar ni una milésima parte de los logros de Hiranyakasipu. Hiranyakasipu podía viajar a voluntad al fondo del mar. Las alturas del espacio o las entrañas de la Tierra no podían limitarlo tampoco. Investigó la naturaleza de los átomos. A pesar de sus logros colosales, no se conocía a sí mismo. Y nuestros sabios eran mucho mayores que Hiranyakasipu. Por lo tanto, no es posible comparar a los sabios con nadie. ¡Qué esfuerzos hicieron! ¡Qué estupendos poderes ganaron!

Los médicos de hoy se enorgullecen de su habilidad para hacer operaciones. Después de leer montones de libros, después de viajar al extranjero, después de convertir en mártires a muchas almas desafortunadas, ¡se proclaman médicos consumados! Incluso para eso, dependen de muchos instrumentos electrónicos. Pero en la antigua India, había un sabio que era un experto en las ciencias de la salud: Bharadwaja.

El sabio Bharadwaja dominó la medicina y la cirugía y la propagó como Ayurveda. ¿Qué es Ayurveda? Ayu (edad) + Veda = Ayurveda. Esa rama de los Vedas que nos otorga vida es el Ayurveda. Lamentablemente, hoy hemos perdido la fe en ello debido a nuestra impaciencia. ¡Queremos resultados rápidos! Las curas rápidas pueden producir enfermedades rápidas, con igual facilidad.

Por ejemplo, los antibióticos. ¡Resultados rápidos! Dos gotas de antibiótico reducen la fiebre en poco tiempo. Sí, se cura. Pero después sobreviene más fiebre, como una reacción retardada. El poder de las austeridades reunido por los sabios los hizo aptos para descubrir métodos que no tienen tales reacciones adversas.

Por lo tanto, estudiantes, comprendan cómo la humanidad comenzó en un nivel animal e hizo un progreso gradual, entendiendo finalmente los secretos de la creación y del Creador Mismo. Nadie nace erudito o vidente. La humanidad pudo acumular gradualmente conocimiento sobre la Verdad, solo con fe y devoción.

Superamos innumerables problemas para conseguir dos letras, como B.A. o M.A.[1] ¿Gastamos siquiera una fracción de ese esfuerzo para reconocer a la Divinidad? ¿Qué hemos ofrecido para volvernos dignos de la Gracia de Dios? Nada en absoluto. Debemos hacer esfuerzos proporcionales al fruto que esperamos. Solo con la práctica pueden tener éxito. No debemos rendirnos diciendo: «No sé». ¡Solo lo desconocido vale la pena de ser perseguido! Este fue el sentido de aventura de nuestros grandes sabios. Con este fin, soportaron problemas, abatimiento, calor y lluvia, y superaron todos los obstáculos.

Hoy en día, queremos que cada empresa sea serena, suave y libre de obstáculos. No podemos tolerar ni el menor inconveniente. Quien desea serenidad todo el tiempo no puede lograr nada. ¡Quien pone su mirada en la victoria pierde el derecho a exigir serenidad! Por lo tanto, debemos renunciar a todo y ofrecernos a Dios. Entonces, toda la sabiduría trascendental brota dentro de nosotros.

A pesar de que dominaban innumerables ramas del conocimiento y tenían poderes sobrehumanos, los sabios de aquellos días no tenían rastro de orgullo. ¡Los científicos e investigadores de hoy descubren el hecho más pequeño y se comportan como si estuvieran fuera del alcance de todos! Esta arrogancia arruina su intelecto. Una persona verdaderamente educada nunca puede ser engreída.

Estudiantes, tomen nota particular de este punto. La humildad es la joya del carácter de un estudiante. Después de todo, ¿qué ha logrado la ciencia? Nos felicitamos por pequeños éxitos y desarrollamos ego sin razón. Un pequeño ejemplo. El Sol genera una tremenda energía cada momento. Si la energía del Sol es 3000 unidades, no más de 2 unidades son aprovechadas por los científicos. Si meras 2 unidades pudieron saturar el mundo con tanta energía, ¡imaginen cuán resplandeciente sería este planeta con las 2998 unidades restantes!

Por lo tanto, incluso un rayo de la Gracia de Dios nos hace capaces de cada logro. Reconociendo esta verdad, nuestros sabios oraron con toda humildad: «Dios, derrama sobre nosotros un rayo infinitesimal de Tu Gracia». Incluso una chispa de la Gracia de Dios da una abundancia infinita. Sin Él, nadie puede lograr ni la victoria más pequeña.

Un águila no se elevará ni un centímetro si no quiere hacerlo. Con la inclinación a hacerlo, incluso una hormiga puede caminar cientos de kilómetros. La práctica es suprema. La práctica y el esfuerzo es el deber del hombre, mientras que el éxito y el fracaso son la Voluntad de Dios. Por lo tanto, ríndanse a la Voluntad de Dios, ¡y siempre disfrutarán del éxito! «El éxito engendra éxito». Primero ganen la Gracia de Dios, y después, ¡podrán escalar cualquier altura!

Estudiantes:

Hoy su vicerrector planteó una pregunta muy pertinente: «¿Cómo puede uno visualizar, alcanzar y experimentar su divinidad innata?» La pregunta de alcanzar la divinidad es profunda, pero la solución es engañosamente simple.

No se requiere ninguna abstrusa práctica espiritual (sadhana). Gajendra luchó contra el cocodrilo durante miles de años. Luchó duramente, pero ¿con qué base? Con su fuerza física, su ego personal. Mientras ustedes dependan de poderes basados en el ego del cuerpo, el intelecto, el poder, el dinero y demás, nunca podrán ganar. Finalmente, Gajendra se agotó. Reconoció su error y exclamó: «¡Señor, perdóname! ¡No tengo a nadie más que a Ti! ¡Ven y rescátame!» Cuando se rindió —«nadie más que a Ti»—, fue salvado.

Miren a Arjuna. Él también se enorgullecía de su intelecto. En el Bhagavad Gita, hasta el octavo verso del segundo capítulo, Arjuna bombardeó a Krishna con una ráfaga de preguntas. Pero agotó toda su filosofía en poco tiempo. Después de todo, ¿hasta dónde puede llegar el intelecto humano? Pobre hombre, ¡su acumulación de ideas intelectuales de toda la vida fue desinflada en la presencia de Krishna! Finalmente, no pudo pronunciar una palabra más y accedió con las manos juntas: «Haré como Tù dices (Karishye Vachanam Tava)». Entonces Krishna le aseguró: «¡Bien! Vamos, ahora te enseñaré».

«Fija tu mente en Mí, sé devoto de Mí,

sacrifica a Mí, inclínate ante Mí.

Te prometo que vendrás a Mí.

Conoce esta verdad, pues eres querido para Mí».

Manmana bhava Madbhakto,

Madyaaji naam Namaskuru

Maamevaishyasi satyam Te

Pratijaane priyosi Me

«Ahora eres Mi devoto. Desde este momento, Yo cuidaré de ti».

La dedicación al Señor es la forma más fácil de cumplir con el objetivo de la vida. Lamentablemente, los devotos no entienden el concepto de ofrecerse a sí mismos (arpitam). Se comportan como «accionistas»: «La mitad es mía, la mitad es Tuya. Hagamos negocios». Tratan la espiritualidad como una sociedad. «Haré mi trabajo: orar. Haz el Tuyo: derramar gracia sobre mí». No, no, este enfoque no funciona. «Me ofrezco a Ti» es la actitud correcta. Él Mismo se encargará de cada detalle.

En Kodaikanal advertí a los estudiantes sobre este punto. Mientras los chicos están en Mi presencia física, escuchando discursos y viviendo en este entorno cargado espiritualmente, son puros y alegres. El día que parten, cambian para peor. ¿Por qué?

El cuerpo humano está hecho de barro, es perecedero. Un pequeño ejemplo. Tomen una vasija de barro llena de agua. Si no la tocan durante todo un día, como diez centímetros de agua son absorbidos por el barro. Pero si esta vasija llena de agua se hace flotar en un barril de agua, el agua dentro de la vasija no disminuye. Nuestros estudiantes son como la vasija de barro. Los llenamos hasta el borde con el agua de la espiritualidad, pero sus sentimientos interiores se drenan cuando entran en un entorno mundano. ¡Si espiritualizamos nuestro entorno, no habrá cabida para tal peligro!

Aquí tienen buenas compañías (satsanga) y afuera malas compañías (dussanga). ¡Creen y busquen buenas compañías dondequiera que vayan! Solo cuando se involucren en buenas acciones con buenas compañías, su devoción (bhakti) crecerá constantemente sin ser sofocada por la mundanidad.

El solo cantar mantras o repetir el Nombre de Dios no sirve de nada. Debemos involucrarnos en el trabajo de Dios, como les he dicho varias veces. Hanuman llegó a Lanka y se hizo amigo de Vibhishana. Durante su conversación, Vibhishana expresó tristeza: «Hanumanta, eres afortunado, en verdad. Estás incesantemente comprometido en el servicio a Rama, siendo así digno de Su Gracia. He estado repitiendo el Nombre de Rama durante muchos años, pero aún no he logrado Su visión».

Hanuman le hizo hermosas preguntas: «Vibhishana, cantas el nombre de Rama, pero ¿estás involucrado en el trabajo de Rama? Sin trabajar para Rama, ¿cómo puedes esperar Su Gracia? Han pasado muchas semanas desde que Sita Devi fue traída cautiva a Lanka. ¿No es el servicio a Sita un servicio valioso para Rama? ¿Alguna vez has ido al bosquecillo de Ashoka y la has consolado? ¿Te has encontrado con ella siquiera una vez? ¿Te has familiarizado con sus problemas y has tomado medidas para proporcionarle comodidades?

«¡Cada uno de mis cabellos (roma) dice Rama! Pero no me detuve ahí. Ofrecí mi vida a Rama. Estoy comprometido en acciones queridas por Él, día y noche».

Por lo tanto, la lección es: «El nombre de Rama en el corazón, el trabajo de Rama en la mano» (Dil me Ram, haath me kaam). Esta es la manera de ofrecer nuestra vida al Señor.

Tal fue la disciplina espiritual (sadhana) emprendida por los sabios de la antigua India. Sus investigaciones también fueron de intención pura. El hombre no es ordinario. Un nacimiento humano es infrecuente entre todas las especies (Jantoonaam nara janma durlabham). Para hacer significativo este valioso nacimiento, debemos sumergirnos en la contemplación divina e indagar sobre Dios tanto como sea posible.

Estudiantes:

Desde este día, he decidido introducir algunos cambios. El número de estudiantes en nuestros albergues ha crecido. Todos quieren tomar un baño por la mañana antes de la audiencia con Swami (darshan). ¡Algunos estudiantes se ven obligados a despertarse tan temprano como a las 2 de la madrugada! Los baños comienzan a las 2 de la madrugada y terminan a las 8 de la mañana. Con un sueño insuficiente, los pobres estudiantes están apagados en las clases de la tarde.

Por lo tanto, suspendo las clases de la tarde a partir de mañana. Cuando vengan a esta asamblea por la tarde, su mente estará fresca. Asistan a tres clases por la mañana y almuercen a las 11:30. Utilicen las horas después del mediodía para repasar sus lecciones y descansar. Cuando vengan a Mi discurso a las 4 en punto, deben estar frescos. Ahora, los veo somnolientos. A pesar de las hermosas palabras de Swami, noto… [Swami dejó caer la cabeza hacia adelante como si estuviera dormido, y todos rieron]. Consejos invaluables se desperdician así en oídos desatentos.

Según estas instrucciones, el vicerrector organizará tres clases por la mañana, en lugar de las habituales dos, y terminará la escuela a las 11:30. Sin embargo, no deben desperdiciar las horas de la tarde en charlas frívolas. O repasan las lecciones de la mañana, o duermen un poco.

A partir de mañana, expondré sobre el tema «Cómo el hombre puede alcanzar la divinidad», como lo solicitó su vicerrector. Este es el objetivo más apremiante del hombre. Habiendo tomado nacimiento como manava (hombre), su aspiración principal debe ser convertirse en Madhava (Dios). Hoy escuchamos noticias de muchos países. Pero no prestamos atención a la voz desde dentro. Desechen las «novedades» sobre otros y miren hacia el interior: entonces les será fácil desechar las «necedades» dentro de ustedes.

A partir de mañana, asistan a los discursos vespertinos con la mente fresca y limpia. Escucharán lecciones invaluables, así que limpien el recipiente de su corazón para recibirlas. No escucharán nada diferente de las enseñanzas de los sastras, Upanishads y Vedas. Todo está contenido en los Vedas. Pero, debido a la ausencia de personas que puedan digerirlos y explicar la esencia de estas Escrituras, los jóvenes han perdido interés en ellas. He decidido entregarles estas grandes verdades de manera fácil de comprender. A partir de mañana no habrá clases por la tarde.

[Swami concluyó con «Govinda Krishna Jai, Gopala Krishna Jai» en Su voz de oro]

[1] En India, B.A. (Bachelor of Arts) equivale a una licenciatura en un amplio campo de especialidades. M.A (Master of Arts) equivale a un máster en humanidades.


Traduccion SBd